Una dulce espera inusual :)

Seguro como algunos han podido adivinar o como algunos saben, estoy en la dulce espera, pero una dulce espera INUSUAL pues yo no cargo en mi vientre a mi beb@, pues no seré su madre biológica, lo cargo y lo llevo aquí cerquita, en mi corazón. Estoy segura que como toda madre en espera sueño con ELJELLA, me pregunto si llegará a ser feliz, me pregunto si sabré hacer bien esta tarea quizá la segunda más importante de mi vida, me pregunto si será san@, si creerá en Dios, si será intrépid@, si irá en busca de sus sueños, si será libre y estirará sus alas cuando sea el momento, si no seré tan rígida ni tan flexible, si sonreirá más que llorar, sin conocerl@ les juro que ya lo quier@, y aunque en su cuarto (ya listo) no hay cama ni otros porque no sabemos ni la edad ni el sexo de nuestro beb@, está lleno de amor, de ilusiones, de sueños, a veces cuando estoy sola y mi esposo no me veo paso mi mano por la pared de verde agua y por las hermosas ovejas de la cenefa y pienso en ELJELLA y le susurro al universo para que le susurre a través del viento que l@ estoy esperando.

Lo más gracioso e inusual es cuando lo cuento a otros, en reunión de amigas o tías, y me preguntan y tu, cuanto vas a tener hijos??? Y les digo que estoy esperando pues vamos a adoptar, hay muchas y muchos, más del 50% que me preguntan porque??? Que quien es el que no puede tener hijos??? Que si ya he ido o hecho todo lo posible??? Que seguro prefiero mi carrera profesional a ser madre??? O me dicen cosas en forma de chiste que no me dan nada de risa como “que si no doy a luz no sabré que es ser madre”, me dicen tantas cosas, me preguntas otras tantas que me controlo (de verdad que lo intento) para no mandarlas o mandarlos a bueno lugar y decirle en 4 carajos que porque les importa, que quienes son para interrogarme, y algunas personas no entienden los silencios, y muchos menos respuestas como “así lo hemos decidido”, todo lo quieren saber, todo lo quieren conocer, el morbo le gana a la buena actitud. Sin embargo, como siempre, hay las personas que se alegran conmigo, que me cuentan excelentes y animosas historias de hijos del corazón adoptados por algún amigo, primo o tío, y me llenan de ánimo, de valor, de entusiasmo y me enternecen el alma. A mis 36 muchos piensa por mi carácter fuerte y decidido, que ha sido fácil tomar esta decisión, no es así, ha demora un buen tiempo, mi esposo ha sido genial en este proceso, nos hemos probado ante el amor que nos tenemos, hemos conversado mucho, sonreído y llorado, y finalmente hemos pensado que es lo mejor para nuestras vidas, para como la queremos vivir (más bien dicho como la deseamos vivir) y para nuestra felicidad.

Así que, cuando alguien les diga que está en la dulzura espera no en la panza, sino en el corazón, recuerden no preguntemos mucho, alegrémosno, sonriamos, demos fuerzas, que si las dudas de ser buena madre, buen padre o buen matrimonio se ciernen cuando es un hijo biológico, cuando es un hijo adoptado es IGUAL, no te salva de ningún temor, no te salva de ninguna duda y estoy segura que no te salva de ninguna alegría. A veces cierro mis ojos y pienso si ya habrá nacido, que mirará por sus ojos, que hará latir su corazón, que comida le gustará, si caminará, que vestirá, si pasará frio, si habrá sufrido, si sonreirá con prisa y demorará en llorar, a veces cierro mis ojos y pienso que DIOS o la VIDA o el UNIVERSO (como lo vean) en algún momento conjurará a nuestro favor, levantaré el teléfono y será la llamada más esperada del 2013. Espero paciente (que no es mi virtud) y entusiasmada, espero sin mirar cuantos días han pasado sino cuantos vendrán, espero y este blog y sus comentarios me han hecho que esta espera sea deliciosa y alentadora. Ya saben, en este mundo tenemos hijos que nacen de maneras distintas, pero todos son hijos del corazón de sus padres J. Chauuuuuuuuuuuuuuuuuuuu.