De k (que no son kilometros sino kilos)...ánimo si se puede carajo

No se si a ustedes les ha pasado, pero a veces cuando entran a un tienda las chicas (pues normalmente son chicas) que están en atención al cliente las miran de pies a cabeza y con una sonrisa (o noooooo) les dicen – disculpe, aquí solo tenemos tallas “estándar”- y tu piensas: estándar??? Es decir carajo, estoy gorda y no tiene tallas para mi, auuuuhhhhhh como duele.

O esa bella foto en el facebook que muchos hemos visto sobre sirena o ballena y toda la recatafila de filosofía callejera que sobre ella recae, que es súper lindo pero no te salva de los ojos mirones de “no hay tallas para ti gordita” y de “no me entra el pantalón carajoooooo” L.

Y es que aunque ser gorda o gordita o robustita tiene sus encantos, como comer sin sentir remordimiento, o estar siempre sonriente porque no te privas de nada, tiene sus grandes, grandes, inconvenientes. Llega la nueva temporada aquí PRIMAVERA – VERANO, y de todo lo que hay te queda 1 o 2 cosas a mucha fuerza, nada de lo que llevas al probador te queda (o casi nada) y por lo menos yo odio a la mujer que se ve reflejada en el espejo en esas circunstancias y a veces he podido hasta llorar de la cólera, pero bueno luego me convenzo que nada pasa, me como un helado y se acabó (pero si pasa y no se acaba).

Y es que este es un tema ni de gorda (yo soy gorda o como dice Mafalda con mucha sabiduría) ni de flaca, es un tema de salud, cuantas dietas innumerables hemos hecho, cuantas flacas y gordas existimos en el mundo que no podemos correr ni una cuadra sin morirnos del desaliento. Es que a lo que la vida nos ha llevado es a consumir, a tener, a comer deliciosas porquerías, a tomar, pero no a ejercitarnos, a comer sano y ser más saludables.

Yo, detesto poner excusas como “me duele la cabeza, no puedo salir”, cuando en realidad es “no encuentro nada en el armario y me estoy deprimiendo”, creo definitivamente que ser gorda es difícil, hay muchas cosas que nuestros kilos demás guardan entre sus pliegues: nuestras penas, nuestros espacios vacios, nuestros desamores, entre otros.

Así, que creo, que gordas o flacas, hoy podemos tomar un reto SER SALUDABLES, pesarnos todos los meses, chequear nuestra hemoglobina, nuestra grasa y otras hierbas!!!!!, visitar al nutricionista, inscribirnos en el gym o salir a correr, ponernos zapatillas pero para hacer ejercicio, sentirnos felices cada vez que entramos a una tienda o que sudamos a chorro en una clase de aeróbicos, pero sobre todo tener la valentía y el tesón y la constancia (que a mí me falta demasiada para el tema de mi peso) de ser saludable (y de paso bonita – a mis ojos no a los de los demás-). Si se puede CARAJO, ánimo, pongámonos un reto y seamos mujeres de ENERGIA, FUERTES y VIBRANTES.

Chauuuuuuu