jueves, 9 de mayo de 2013

Babeando por mi madre...feliz día de las madres


El domingo es el día de la madre en el Perú y el otro día conversando con una compañera de trabajo le decías estas palabras “no sé qué es ser madre” y ella sabiamente me corrigió “como que no si tienes una súper buena”. A esto uno que en un programa que me encanta escuchar la siquiatra decía que las madres “fabrican” en sentido figurado a los hijos, y ya no en sentido figurado es muy cierto.

Yo, he tenido la bendición de tener una madre como la mía, he tenido la suerte de que sea una mujer libre, graciosa, cariñosa, muy competente y competitiva, estudiosa, profunda, buena de corazón, muy cumplidora (en extremo), muy preocupada del prójimo, muy fuerte y muy perseverante. Aun cuando tengo yo como hija muchas cosas de mi padre (muchassssssss), no puedo negar que tengo un gran tonel de cosas de mi madre, desde las más buenas hasta aquellas que debo mejorar. Gracias a mi madre he hecho mucho deporte durante los primeros 16 años de mi vida, gracias a ella me gusta caminar por el mundo sin hacerme mucha palta, gracias a ella se sonreír de manera natural y ahora me he dado cuenta que casi todo el tiempo (me lo dijeron en una reunión de trabajo como una de mis fortalezas), gracias a ello puedo hacer resúmenes para escribir los artículos que ahora mi trabajo me exige, gracias a ella tengo mis detalles con mi esposo y mis momentos románticos (que deberían ser más corazón) porque ella me enseñó lo valioso de decir “te amo” hoy y no mañana, ella me enseño también la coherencia no solo de “decir sino de hacer”, ella, mi madre, se toma a pecho todos mis proyectos, se anima a veces más que yo, ella, mi madre, es un ser excepcional porque siempre lo que se propone lo logra. Claro, si lee esto me dirá (porque es ya extremadamente humilde) que también tiene sus potencialidades, sus puntos a mejorar (los cuales me los ha heredado) claro si madre, pero ESOS también me han enseñado a ser la persona que ahora soy. Que me gusta de mi madre? Que todo lo que me enseña no está en tiempo pasado, está en tiempo presente; que me gusta de mi madre? Que siempre me sorprende y no deja de sorprenderme cada día; que me gusta de mi madre? Que me enseñó a amarme, que me enseñó a amar y me enseñó a ser libre (estas 3 cosas han hecho la persona que soy, con mis virtudes y mis potencialidades – defectos jajajajajaja-). Creo que sin ella en mi vida no podría ni siquiera pensar en como ser feliz, ella me enseño más de la vida que de matemáticas, y eso siempre será más de lo que necesito para poner un paso delante del otro.

Lo magnifico de esta vida es que además de mi madre, la vida me regaló dos hermosas tías, de las dos he aprendido y aprendo dos cosas importantes (hasta hoy en día) SEGUIR TUS SUEÑOS y SER COHERENTE, de estas tres mujeres (incluyendo mi madre) he aprendido que aunque la verdad joda, es más importante que vivir en la hipocresía (tarea difícil de aprender y seguir). La vida también me trajo dos abuelas, de una puedo decir que aprendí de ternuras y soledades, y de la otra aprendí de fuerza y guisos deliciosos.

Mi amiga, finalmente tiene razón, yo se mucho de ser madre, porque la vida me trajo UNA que es UNA CAMPEONA, hoy y siempre, que aunque hemos discutido (y aun lo hacemos) aunque a veces damos horas de espacio para que la relación de ventile, nos amamos inmensamente, creo que si existieran otras vidas no lo lograríamos separadas, yo la amo y ella me ama, tal cual el poema que aprendí en el nido, eso, gracias a Dios no ha cambiado.

FELIZ DIA DE LAS MADRES a todas las madres que leen estas líneas, a todas las que sé que las leen y son madres quiero que sepan que las admiro, admiro como pueden ser madres, y mujeres, y profesionales, y esposas, e hijas, y amigas, y todo con una sonrisa en los labios y las vitaminas en la cartera. Les mando un fuerte abrazo, que Dios les dé siempre la serenidad y el amor que se necesita para ser madres sin dejar ustedes mismas, que para MI ha sido uno de los mayores aprendizajes que me llevo de MARICUCHA, mi madre.

3 comentarios:

  1. No me reconozco, querida hija. Sin embargo te agradezco de todo corazón el cariño que me has dado a través de tus palabras. La que babea soy yo. Te quiero. Maricucha

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  2. No había leído esta entrada... muy interesante la reflexión pero más importante: muy tiernas las evocaciones.
    Precioso y añorable.

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  3. Gracias a ambas por sus comentarios, las quiero infinitamente

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